Que consecuencias puede tener un tendón lesionado a corto plazo

Tendinitis del pie

Las lesiones de los tendones pueden ser secundarias a un traumatismo agudo (por ejemplo, una rotura o una laceración) o a una carga repetitiva (por ejemplo, una lesión por uso excesivo). Esta última es el tema central de este artículo y es el tipo de problema tendinoso más común que ven los médicos de familia. Las lesiones por uso excesivo, incluidas las tendinopatías, representan casi el 7 por ciento de todas las consultas médicas relacionadas con lesiones en los Estados Unidos.1 Cientos de miles de empleados se ven afectados por tendinopatías por uso excesivo cada año, lo que provoca una importante pérdida de tiempo de trabajo.2 Entender la fisiopatología, los criterios de diagnóstico y el tratamiento de las tendinopatías puede ayudar a reducir el dolor, acelerar la recuperación de la función y reducir el impacto económico de la pérdida de productividad en la mano de obra.

El tendón está compuesto por fibras de colágeno densamente dispuestas, elastina, proteoglicanos y lípidos. Está recubierto por el epitenon, que contiene el suministro neurovascular del tendón. La fuerza muscular se transmite al esqueleto en el punto donde el tendón se inserta en el hueso. Esta unión osteotendinosa es el lugar más común de las lesiones tendinosas por sobrecarga, pero los problemas pueden ocurrir en todo el lugar.

Lesión del tendón flexor

Los tendones son las estructuras elásticas en forma de correa que unen los músculos a los huesos sobre los que actúan. La mayoría de los tendones son relativamente cortos y rara vez se dañan. Sin embargo, los tendones largos de las extremidades son vulnerables a los daños durante el ejercicio o como resultado de un traumatismo. Los tendones flexores son las estructuras tendinosas largas más importantes propensas a sufrir lesiones.

Los tendones flexores, que están formados por el tendón flexor digital profundo (DDFT) y el tendón flexor digital superficial (SDFT), recorren la parte posterior de la extremidad desde el nivel de la rodilla/corvejón hasta el pie. El SDFT termina en la cuartilla y el DDFT en la parte posterior del hueso del pie. A nivel de la rodilla/corvejón, junto con la región del menudillo y la cuartilla, los tendones están rodeados por una vaina llena de líquido. La vaina más comúnmente reconocida es la vaina digital en la región del menudillo/corvejón, con la vaina del corvejón llamada vaina del tarso y la vaina de la rodilla llamada vaina del carpo. Varios ligamentos anulares fuertes y cortos ayudan a mantener los tendones en su sitio en las regiones de gran movimiento, como las articulaciones.

Tendinitis de la mano

Un tendón es una banda de tejido fibroso que conecta un músculo con un hueso. Los médicos tienen muchos nombres para describir cuando el tejido del tendón está inflamado, lesionado o dañado, incluyendo tendinitis, tendinosis y tendinopatía, así como paratenonitis, tenosinovitis y desgarro del tendón (rotura).

En su día se utilizaba para describir casi cualquier dolor tendinoso, pero ahora los profesionales médicos sólo utilizan el término tendinitis para describir la inflamación aguda del tendón debida a pequeños (micro) desgarros (el sufijo “itis” indica inflamación).

La tendinitis puede desarrollarse como resultado de una lesión repentina y aguda o de microtraumas repetidos en un tendón o grupo de tendones. Los tratamientos recomendados para reducir la inflamación pueden incluir el reposo de la articulación afectada y la toma de antiinflamatorios no esteroideos (AINE) de venta libre, como el ibuprofeno (por ejemplo, Motrin, Advil) o el naproxeno (por ejemplo, Aleve, Naprosyn). Los pacientes con tendinitis suelen recuperarse en varias semanas.

La tendinosis es la degeneración no inflamatoria de un tendón. Esta degeneración puede incluir cambios en la estructura o composición del tendón. Estos cambios suelen ser el resultado de lesiones por esfuerzo repetitivo en un tendón sin el tiempo adecuado para su curación.

Efectos del ejercicio sobre los ligamentos y los tendones

Los tendones son haces o bandas en forma de cuerda de fibras fuertes, lisas y brillantes que unen los músculos a los huesos. Los tendones transfieren la fuerza del músculo al hueso para producir el movimiento de las articulaciones. Existen dos tipos de tendones: los tendones sin vaina (figura 1) y los tendones con vaina (figura 2). Figura 1 Figura 2

Los trastornos de los tendones, o tendinopatías, son condiciones médicas que hacen que los tendones no funcionen normalmente. La tendinitis es un trastorno de los tendones sin vaina y la tenosinovitis es un trastorno de los tendones con vaina.

Tradicionalmente, la tendinitis (también llamada tendinitis) es el término utilizado para describir una inflamación o irritación de un tendón. Con las actividades repetitivas o prolongadas, los esfuerzos forzados, las posturas incómodas y estáticas, las vibraciones y el estrés mecánico localizado, las fibras de los tendones pueden romperse de la misma manera que una cuerda se deshilacha.Estos cambios en los tendones desencadenan una respuesta inflamatoria. La inflamación es una respuesta localizada del tejido a una lesión. Con el tiempo, los tendones inflamados se vuelven más gruesos, abultados e irregulares. Sin descanso y tiempo para que el tejido sane, los tendones pueden debilitarse de forma permanente. Dado que el término “tendinitis” implica la presencia de una inflamación, este término rara vez se utiliza. “Tendinopatía” o “tendinosis” es el término preferido para describir el dolor crónico asociado a un tendón sintomático.

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